Una de cada 5 personas en el mundo no tiene acceso a la electricidad. La cifra es aún más impactante en África sub-sahariana, donde 2 de cada 3 personas es pobre en términos energéticos.
Una de cada 5 personas en el mundo no tiene acceso a la electricidad. La cifra es aún más impactante en África sub-sahariana, donde 2 de cada 3 personas es pobre en términos energéticos.
El emprendimiento social busca construir y/o transformar una situación subóptima de determinada parte de la humanidad en un mejor entorno, un entorno con las condiciones viables para el mayor bienestar de las personas involucradas en él.”
El Fondo de Asistencia Internacional de los Estudiantes y Académicos Noruegos (SAIH) vuelve a la carga con una ácida parodia sobre África y la visión occidental del voluntariado.
774 millones de personas mayores de 15 años en el mundo son analfabetas. Esta situación implica una cadena de oportunidades frustradas que no sólo impiden el desarrollo personal sino que también dificultan el desarrollo comunitario.
La economista del desarrollo Esther Duflo trabaja para conocer la efectividad de actuaciones en la lucha contra la pobreza. Su método: experimentos aleatorios en países en vías de desarrollo para medir el impacto de intervenciones como regalar en lugar de subvencionar redes tratadas con insecticida para frenar la malaria o dar incentivos para acudir a la vacunación de los niños
A pocos días de la finalización del mundial, analizamos el compromiso con los derechos humanos que este tipo de eventos deportivos deben cumplir en el país sede.
Recientes informes de Cruz Roja, Cáritas y Save the Children alertan de una emergencia alimentaria en el Estado español. Sin bien las cifras varían de una comunidad autónoma a otra, Cataluña es una de las más afectadas.
¿Son los niños afganos violados impunemente por todo el país? Los niños afganos se encuentran sometidos a un sinfín de penalidades y abusos, entre los cuales que se encuentra esta práctica, actualmente extendida por todo el país. Forzados a vestirse y maquillarse como lo hacen las mujeres, actúan en fiestas privadas para hombres poderosos en el país.
Desarrollar políticas favorables a pequeños y medianos agricultores y ganaderos y dar incentivos a la producción local son medidas fundamentales para asegurar el acceso a los alimentos.
La seguridad alimentaria, esencial para asegurar la buena salud de las comunidades de los países en vías de desarrollo, se ha convertido en un problema de alcance mundial. Suministrar la cantidad necesaria de alimentos y garantizar su calidad y acceso es esencial en las políticas de cooperación al desarrollo. No obstante, y a causa de la crisis global, esta prioridad se ha visto relegada a un segundo plano y se ha producido, en consecuencia, un aumento considerable de las personas que pasan hambre en el mundo.
El impacto de la crisis de los precios de los alimentos durante 2007 y 2008 y la crisis financiera que azota al mundo desde 2009 han empeorado la situación. Algunos de los productos que más han incrementado su precio son el aceite, el azúcar, el trigo o el maíz, todos ellos productos de primera necesidad y con grandes índices de consumo. Actualmente, se habla de mil millones de personas que pasan hambre en el mundo (sobre todo en el continente africano), una sexta parte de la humanidad. La agricultura, eje de desarrollo social y económico de los países en vías de desarrollo, sigue constituyendo una actividad fundamental en las comunidades empobrecidas. Se considera a este sector un pilar esencial en la lucha contra la pobreza.
El concepto de seguridad alimentaria no sólo tiene que ver con el acceso a los alimentos, sino que también contempla el acceso a alimentos de calidad que conformen una dieta equilibrada y sana y con el acceso y el saneamiento de aguas. La seguridad alimentaria cobra especial relevancia cuando se trabaja con salud materno-infantil, una de las áreas fundamentales para el desarrollo de las comunidades.
Según Antonio Marquina Barrio[1], catedrático y director del departamento de Relaciones Internacionales de la Universidad Complutense de Madrid, “hay que invertir en desarrollo agrícola y formar a agricultores y ganaderos, es decir, dar los instrumentos necesarios para garantizar las buenas prácticas”. De la misma manera, “se debe invertir en las empresas de producción de alimentos y desarrollar políticas de producción favorables a los agricultores y ganaderos”.
No obstante, hay un factor de gran importancia que no debemos olvidar: el cambio climático. Marquina Barrio asegura que “el cambio climático es un factor variable y no controlable, pero no por eso hay que dejarlo de lado”. El incremento de temperaturas, la caída de las precipitaciones, las variaciones estacionarias de las lluvias, la escasez de combustible para producir fertilizantes, el uso desmesurado de pesticidas y herbicidas y la degradación de la calidad de los suelo, (más del 40% de suelo del mundo está dañado), determinarán de manera concluyente el desarrollo de la seguridad alimentaria en todos los países del mundo.
Es necesario trabajar por la mejora de las condiciones de vida de las comunidades rurales y por el desarrollo agrícola para garantizar la suficiencia nacional de los productos básicos de primera necesidad. Además, hay que fomentar la protección del medio ambiente y asegurar un desarrollo sostenible para reducir la vulnerabilidad de la producción a las condiciones climáticas. Para ello, es fundamental dar apoyo a los pequeños y medianos agricultores y promover un mercado transparente que de incentivos a la producción agrícola local para reducir las importaciones. Sólo mediante el esfuerzo y la comprensión de la importancia de la seguridad alimentaria en los países del sur se podrá llegar a una situación estable donde todas las comunidades tengan acceso a una serie de alimentos de calidad que garanticen su buena salud.
Ésta es una explicación sin ánimo de lucro.
Según EPN México goza de “estabilidad política” y ha experimentado una disminución de la pobreza, lo cual no es sino un claro reflejo del alejamiento del actual sistema político respecto a una población que dice representar.