19/03/2024 MÉXICO

¿El modelo autoritario chino es sostenible a largo plazo?

El 353 Plaza en la calle Nanjing Road en Shanghai. [Photo: Xiao C Flickr account]
El modelo autoritario chino ha disminuido al mínimo la presencia de opositores a las medidas tomadas por el Gobierno en su proceso de apertura económica. Pero numerosos autores sugieren que si el Gobierno no empieza a dar concesiones y a ser más inclusivo el crecimiento económico puede verse afectado.

Un dragón gigante de pies pequeños


En la actualidad, no existe consenso entre los académicos y los policymakers sobre si, y cómo, un sistema democrático afecta al crecimiento económico. Aunque el gobierno chino ha logrado manejar hasta el momento el aumento de las tensiones entre la modernización económica y las muchas deficiencias institucionales del régimen autoritario (estructuras financieras tambaleantes, una mala calidad de gobierno corporativo, un incompleto reconocimiento de la propiedad privada, un poder judicial débil y la presencia de una generalizada corrupción), el país no podrá sostener el rápido crecimiento económico sin la realización de un conjunto de reformas en el sistema político.

Dictadura vs democracia

Soldado en la Plaza Tiananmen delante el retrato de Mao. [Photo: [Satbir] Flickr account]

Según el investigador Knutsen las desventajas del régimen dictatorial pueden ser la falta de información a la hora de tomar decisiones, el mal uso de la información disponible, y el descontento latente o reprimido de la población. Por ello, las dictaduras recorren, como lo ha hecho China, a descentralizar la toma de decisiones y a la creación de instituciones, a fin de minimizar esa pérdida de información.

Por otro lado, las democracias se asocian con la distribución del poder, tanto a nivel geográfico como en los distintos niveles verticales de las administraciones, así como al desarrollo de instituciones que proporcionan una mejor rendición de cuentas. Así, se proporcionan controles contra violaciones de los derechos de propiedad para controlar la corrupción. Además, el flujo abierto de información en las democracias mejora las capacidades para la corrección de errores políticos y para la difusión de tecnología

Si revisamos la situación actual de China en materia de competitividad (según el Global Competitiveness Report 2010/2011 China se sitúa en el lugar 27 de un total de 139), observamos que, a pesar de que el país asiático está bien posicionada a nivel mundial, muestra importantes elementos coyunturales de mejora, como la dificultad de acceso al crédito, la inflación o las excesivas regulaciones en materia de impuestos, así como otros elementos de tipo más estructural, como la inestabilidad de las políticas y la corrupción. Por segunda vez ponemos el énfasis en la corrupción y, con ello, en la necesidad de ampliar y hacer más efectivas el conjunto de medidas para combatirla[1].

Necesidad de reformas en el sistema político

Según el académico Pablo Bustelo en China la falta de independencia del sistema judicial y la falta de protección de los derechos de propiedad intelectual podrían a la larga afectar negativamente a la inversión extranjera directa y a las exportaciones hacia los países desarrollados. Por ello son necesarias reformas para hacer del sistema político chino un sistema más sensible y respetuoso con la propiedad y los derechos individuales.

Por otro lado, el galopante crecimiento que está experimentando China, que con toda probabilidad continuará en los próximos años, pronostica el surgimiento de una clase media que para el año 2025 habrá alcanzado las 520 millones de personas, más de la mitad de la población urbana esperada en el país (según pronostica la prestigiosa consultora McKinsey), lo que puede ocasionar profundos cambios sociales y mentales, que junto a las nuevas generaciones formadas en el extranjero, provocarán con toda probabilidad demandas de mayor participación política.

La mayoría de los chinos sienten mucho orgullo por su país aunque no todos estén satisfechos con lo que sucede. [Photo: \!/_PeacePlusOne Flickr account]

Así, tal y como se identifica en el informe elaborado por el Centro Nacional de Inteligencia de los Estados Unidos, State of the world 2020, mientras que en la India han arraigado bien las instituciones democráticas, lo que reduce su vulnerabilidad a la inestabilidad política[2] a medio plazo, China se enfrenta al reto de conciliar una población de clase media cada vez más urbana con un sistema político esencialmente autoritario. De este modo China, según el informe, podría encontrar su propio camino hacia una “democracia con características chinas”, que reduzca las implicaciones hacia la inestabilidad, y evitar que afecte a su futuro crecimiento económico.

La importancia de la estabilidad política

La estabilidad política desempeña un papel fundamental en el crecimiento económico, pues según numerosos estudios existe una relación directa e indirecta entre estabilidad política y crecimiento económico. Una parte de los factores explicativos del impresionante crecimiento económico de China se basa precisamente en su parcial estabilidad política, a la que se suman la política de élites favorable a las medidas de apertura hacia una economía de mercado, la baja necesidad de inclusión política y la mejora de la eficiencia gubernamental, lograda por medio de la descentralización.


Un país como la India, por ejemplo, se encuentra en una situación opuesta, con una mayor inestabilidad política, mayor necesidad de inclusión social y una política orientada a las masas. A pesar de ello ha obtenido también importantes avances en su crecimiento económico debido a un aumento de su eficiencia gubernamental, a una mayor descentralización del gobierno, a una mejora en la lucha contra la corrupción y un más avanzado estado de derecho.

Aún existe una gran desigualdad en China. [Photo: [Satbir] Flickr account]

En el largo plazo, hablar de crecimiento económico es hablar de competitividad, lo cual apunta directamente hacia la productividad (cantidad de riqueza generada según los recursos invertidos), lo que a su vez apunta hacia lainnovación. Y la innovación requiere de una mayor apertura que favorezca la competencia, que a su vez precisa de un mercado real sin un excesivo intervencionismo gubernamental. Del mismo modo, una mayor apertura suele venir asociada con un aumento de las libertades democráticas que deben fomentar una mejora en la gobernanza (es decir gobernar de forma eficaz, con calidad y con una buena orientación en la intervención del Estado, así como de forma relacional haciendo partícipes a todos los implicados), pues ésta resulta imprescindible en la creación de instituciones de calidad que fomenten la competitividad.

Para sostener el crecimiento económico a largo plazo el mayor reto de China (y también de la India) es mejorar su gobernanza, reduciendo la inestabilidad política y combatiendo la corrupción. Así que a China una mayor apertura hacia la participación de la sociedad en la vida política no le vendría nada mal, ya que favorecería una mayor estabilidad política y generaría políticas más sensibles hacia sus ciudadanos, como serían por ejemplo el abordar la creciente, y preocupante, desigualdad, tanto a nivel de ingresos económicos como de servicios públicos, existente entre el mundo rural y urbano.


Ésta es una explicación sin ánimo de lucro


[1] Entre los años 1992 y 1997 sólo el 6% de los miembros del Partido Comunista investigados por fraude o corrupción terminaron siendo condenados por delitos criminales.

[2] Muchos estudios han identificado diversas fuentes que favorecen el rápido crecimiento económico (la acumulación de capital humano, la acumulación de capital físico, la mejora de la tecnología, el comercio exterior, la inversión en comercio exterior y las actitudes de las personas) y que dependen directa e indirectamente de la estabilidad política.

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Lluis Torrent

Barcelona, España. Licenciado en Ciencias Ambientales, Máster en Intervención Ambiental, Máster en Relaciones Internacionales y Especialista en Ciencia Política. He trabajado como consultor ambiental para gobiernos locales y regionales y empresa privada. Socialmente comprometido, me apasiona explorar la fina línea que transcurre entre la política, la economía, la sociedad y el medio ambiente. Sígueme en Google+ Lluis Torrent


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