19/03/2024 MÉXICO

¿Qué es el Litio y cuál es su importancia geopolítica?

litio

Durante el siglo XX, el petróleo fue el recurso que predominó en la geopolítica mundial, siendo muy valorado tanto por las naciones productoras como por aquellas que lo necesitaban como insumo básico para su desarrollo industrial. No obstante, las diversas crisis que atravesó este recurso y la creciente conciencia ambiental obligaron a la humanidad a buscar alternativas energéticas más sostenibles, tales como la energía eólica, solar o nuclear, entre otras.

Es en este contexto que el litio emergió como una alternativa prometedora, capaz de cumplir con la necesidad de baterías que pudieran almacenar energía de manera eficiente y soportar altas demandas. Actualmente, el litio se ha convertido en uno de los minerales más importantes para la transición ecológica y la economía mundial, convirtiéndose en la estrella del sector.

En este artículo, nos adentraremos en el litio, explorando su definición y utilidad, así como también su importancia geopolítica y otros detalles sobre lo que se ha denominado el “oro blanco“.

¿Qué es el litio? ¿Cómo se extrae?

El litio es un elemento químico metálico con número atómico 3 y símbolo Li. Es un metal alcalino, blando, altamente reactivo, de color blanco plateado, que se encuentra en la naturaleza en forma de sal en suelos y rocas, y en algunos lagos y manantiales. Fue descubierto en 1817 por el químico sueco Johan August Arfwedson.

Es el metal más ligero y menos denso conocido, es altamente conductor de la electricidad y el calor. La extracción de litio se realiza en diferentes formas, dependiendo de la ubicación y las características del depósito de litio. Uno de los métodos más comunes para la extracción de litio es la minería a cielo abierto. Este método implica la eliminación de grandes cantidades de roca y tierra para exponer las capas de mineral de litio. Luego, se extrae el mineral de litio y se procesa para obtenerlo.


Otro método utilizado para extraer el litio es la minería subterránea. Este método se utiliza cuando el depósito de litio se encuentra a mayor profundidad y no es económicamente viable extraerlo mediante minería a cielo abierto. En la minería subterránea, se excavan túneles o galerías debajo de la superficie de la tierra para extraer el mineral de litio.

Además, hay un método de extracción más reciente y menos común llamado extracción de salmuera. Este método se utiliza en depósitos de litio salino y consiste en la perforación de pozos en los depósitos subterráneos de salmuera que contienen litio. Luego, se bombea la salmuera a la superficie, se filtra y se procesa para extraer este mineral.

Después de la extracción, el litio debe ser procesado y refinado antes de ser utilizado en la fabricación de baterías y otros productos. El proceso de refinación puede incluir varias etapas de tratamiento químico y purificación para producir un mineral de alta pureza.

¿Para qué sirve y en que se usa?


El litio es un elemento químico muy versátil que se utiliza en una amplia gama de aplicaciones. Es conocido principalmente por su uso en la fabricación de baterías recargables de iones de litio que alimentan muchos de nuestros dispositivos electrónicos modernos, como teléfonos móviles, computadoras portátiles y cámaras digitales.

Además, el litio es un componente clave de las baterías utilizadas para almacenar energía renovable, como la energía solar y eólica, para su uso posterior cuando la energía no está disponible.

La energía renovable es variable y no siempre está disponible en el momento en que se necesita, por lo que el almacenamiento es esencial para garantizar que haya suficiente energía disponible en todo momento. El litio es uno de los materiales más efectivos para almacenar energía debido a su alta densidad como su aptitud para ser recargado y descargado muchas veces sin perder su capacidad.

Fotagrafía: obtenida de Shutterstock. Bateria de iones de litio recargable usada en dispositivos móviles.

Sin embargo, el litio también tiene otros usos importantes en la industria, la medicina y la tecnología, utilizándose en la fabricación de vidrio y cerámica, como aditivo para mejorar su resistencia y durabilidad.


A su vez, se emplea como componente de algunas aleaciones metálicas, especialmente aquellas que se utilizan en la fabricación de aviones y otros vehículos. En la industria de lubricantes y grasas, el litio se utiliza como un espesante para mejorar su viscosidad y estabilidad.

En temas medicinales, el litio goza de una utilidad importante, siendo manipulado para tratar diversas patologías clínicas. Por ejemplo, tiene un uso importante en el tratamiento de enfermedades renales crónicas, ya que, ayuda a reducir la excreción de proteínas en la orina y, en algunos casos, puede retrasar la progresión de la enfermedad. También se lo ha utilizado en tratamientos de trastornos psiquiátricos como la depresión bipolar y la manía. Es efectivo en la reducción de los síntomas de estos trastornos, aunque su mecanismo de acción no se comprende completamente.

¿Dónde están las mayores reservas de litio en el mundo?

A nivel mundial, las mayores reservas de litio se encuentran en América del Sur, en la región del conocido “Triángulo del Litio“, que abarca Argentina, Chile y Bolivia. Chile es el país que alberga la mayor cantidad de reservas de litio en el mundo, con una estimación de alrededor de 8.6 millones de toneladas de litio en el Salar de Atacama. Además, es el mayor país productor de litio en el mundo, con una producción de más de 100,000 toneladas de litio por año.

Australia es el segundo país con mayores reservas de litio, con la mina Greenbushes ubicada en el suroeste de Australia, que se considera la segunda fuente más grande de litio del mundo, con reservas estimadas en 1.3 millones de toneladas de litio.

Argentina es el tercer país con mayores reservas de litio en el mundo, con el salar del Hombre Muerto ubicado en la provincia de Salta. Este lugar contiene una reserva estimada de 1.2 millones de toneladas de litio.

Infografía y fuente: Bolsa de Comercio de Rosario, Argentina.

Otros países con importantes reservas de litio incluyen a Bolivia, que alberga el Salar de Uyuni, considerado el mayor depósito de litio del mundo, con alrededor de 9 millones de toneladas de litio, pero al contar con demasiada presencia de magnesio hace más cara y difícil su extracción. China, cuenta con reservas estimadas en 3.2 millones de toneladas de litio.

Sin embargo, se puede destacar que en México, la mina de Sonora posee una reserva estimada de alrededor de 2.8 millones de toneladas de litio. En Brasil, se han descubierto depósitos de litio en la región de Minas Gerais, con una reserva estimada en 1.3 millones de toneladas de litio. Canadá, ha identificado depósitos de litio en la región de Manitoba, en la mina Tanco, aunque la producción es limitada debido a la baja calidad del mineral.

El mercado del litio

Antes de que el litio se convirtiera en uno de los minerales más buscados en este siglo, fue un recurso estratégico en la industria militar utilizado en la fabricación de la bomba de hidrógeno durante la primera mitad del siglo XX. A pesar de que se desarrollaron las primeras baterías recargables funcionales de iones de litio en la década de los 80, la investigación se detuvo en ese momento para concentrarse en otros químicos.

En la década de los 90, la compañía japonesa Sony comercializó la primera batería recargable de iones de litio. Esta batería, más pequeña y con mayor capacidad que las convencionales, revolucionó el mercado de electrónicos de consumo al ofrecer una densidad energética mucho mayor que otros sistemas electroquímicos.

Sin embargo, el auge actual del litio no se debe solo a su uso en dispositivos electrónicos, ya que la cantidad requerida para alimentar una cámara portátil o un teléfono es relativamente pequeña. La verdadera demanda surgió de la importancia creciente de las energías limpias a principios del siglo XXI.

Gracias a la mejora y abaratamiento de los componentes tecnológicos necesarios y las baterías recargables de iones de litio, fue posible la difusión del uso de la generación de energía eléctrica con fuentes renovables. Estas baterías permitieron el almacenamiento de la energía eléctrica generada con mayor eficiencia, lo que permitió su distribución por las redes de consumo.

Esto genera un gran boom para su consumo, convirtiéndose en un bien preciado para la transición ecológica, pero su importancia se resalta por empresas y países que lo ven como un recurso estratégico para la industria del futuro vinculada a la provisión de autos eléctricos u otros objetos tecnológicos.

La importancia geopolítica: el “oro blanco”

El litio es un mineral clave en la transición energética hacia fuentes renovables y, por lo tanto, tiene una gran importancia estratégica y geopolítica. La creciente demanda ha hecho que este mineral se convierta en un recurso muy codiciado en todo el mundo.

La importancia estratégica de este nuevo preciado mineral radica en su papel en la transición energética hacia fuentes renovables. A medida que los países buscan reducir su dependencia de los combustibles fósiles y aminorar las emisiones de gases de efecto invernadero, la energía renovable se está convirtiendo en una opción cada vez más atractiva.

Sin embargo, la generación de energía renovable es intermitente, lo que significa que a menudo se genera más energía de la que se consume en el momento en que se produce. Por lo tanto, el almacenamiento de este tipo de energía es fundamental para la implementación exitosa de cualquier tipo de energía renovable.

Las baterías de iones de litio son la tecnología de almacenamiento más comúnmente utilizada en la actualidad, ya que son muy eficientes y tienen una alta densidad de energía. El litio es el elemento clave en la fabricación de estas baterías, por lo que su disponibilidad es crucial para la transición energética hacia fuentes renovables.

En términos geopolíticos, la explotación del litio puede tener implicaciones significativas en las relaciones internacionales y la seguridad nacional. Algunos de los países con las mayores reservas de litio se encuentran en América Latina, como se detallaba anteriormente entre tres naciones: Bolivia, Chile y Argentina. Estos países tienen una posición privilegiada en la producción de litio, lo que los convierte en actores clave en la cadena de suministro global de baterías de iones de litio.

Fotografía: obtenida de Pixabay. Explotación de litio en Salta, Argentina.

La explotación del litio puede tener un impacto significativo en la economía de estos países, lo que puede tener implicaciones para la estabilidad política y social. En algunos casos, la explotación de recursos naturales ha llevado a conflictos sociales y políticos en países en desarrollo, lo que puede tener un impacto negativo en la estabilidad regional y global.

Además, la dependencia de los países importadores de litio puede ser un riesgo de seguridad nacional. Si un país depende en gran medida de las importaciones de litio para su industria tecnológica y energética, cualquier interrupción en la cadena de suministro puede tener un impacto significativo en su economía y seguridad nacional.

En este sentido, algunos países están tomando medidas para asegurar su acceso al litio y reducir su dependencia de la importación de este mineral. China, por ejemplo, está invirtiendo en la exploración y explotación de litio en otros países, como Australia, y también está desarrollando tecnologías alternativas de almacenamiento de energía, como las baterías de flujo de vanadio.

El futuro del litio: ¿existirá una OPEP del litio?

El futuro del litio es prometedor, ya que se espera que la demanda de baterías de iones de litio siga aumentando a medida que se desarrollen y popularicen los vehículos eléctricos u otras tecnologías que requieren baterías. Según un informe de BloombergNEF, se espera que la demanda mundial de baterías de iones de litio se multiplique por diez entre 2020 y 2030.

Además de los vehículos eléctricos, la energía renovable también impulsa la demanda de baterías de iones de litio, ya que las baterías pueden almacenar la energía generada por fuentes renovables, como la energía solar y eólica, para su uso en momentos en que la energía no está disponible. Se espera que esta demanda siga aumentando a medida que más países adopten políticas de energía limpia y se acreciente su base de usuarios.

En términos de producción, se espera que la producción siga aumentando a medida que se abran más minas y se mejoren los procesos de extracción y producción. Además, se están desarrollando nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia de las baterías y reducir el costo del litio, lo que podría aumentar aún más la demanda en el futuro.

Fotografía: obtenida de la página web del Gobierno de la República de Chile. Presidente Boric anuncia nacionalización del Litio.

En ese sentido, se ha despertado un debate sobre la posible creación de una simil “OPEP” pero del Litio. Algunos países como Chile y Bolivia, han dado un paso para la nacionalización de lo que entienden será una industria clave para el desarrollo de la economía de sus países.

En tanto, que Argentina tiene vedada esa posibilidad, debido a que con la reforma constitucional de 1994, se estableció que los dueños del subsuelo del territorio con sus recursos eran las unidades subnacionales, o sea, los gobiernos provinciales. Esta cuestión debilita cualquier uso estratégico a nivel federal, delegando el manejo de los recursos enteramente a los gobiernos locales.

Esta cuestión limita la posible creación de una entidad regional o internacional, que en la práctica “cartelice” el precio del litio o permita una coordinación a nivel internacional de la extracción, comercialización y utilización del litio.

¿Quieres recibir más explicaciones como esta por email?

Suscríbete a nuestra Newsletter:


De Ruba Leonel

Tesista de la Licenciatura en Relaciones Internacionales que se dicta en la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Católica de Salta, Argentina. Es miembro del Instituto de Relaciones Internacionales y Ciencia Política de la Universidad Católica de Salta, Argentina y del Centro de Estudios Estratégicos de Relaciones Internacionales, Argentina. Ha realizado cursos y diplomaturas relacionadas a cooperación internacional, relaciones internacionales e internacionalización de unidades subnacionales. Interesado en la interrelación de la sociedad, la política, la economía y el poder.


Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

eighteen − fifteen =

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.