China se ha posicionado como uno de los principales actores en el escenario global, ganando terreno en diferentes arenas, desde lo económico hasta lo militar, desplazando a Estados Unidos en la región de Asia, ante esto la nación americana ha tenido diferentes intentos por contener a China, a través del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP), la Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión (TTIP) y el Acuerdo de Comercio de Servicios (TISA), proyectos que no fueron exitosos.
Ante esto, se ha delineado un nuevo bloque conformado por Australia, Reino Unido y Estados Unidos (EUA), el cual se anunció públicamente el 15 de septiembre de 2021, mediante un acuerdo de compra de submarinos de propulsión nuclear de Australia a EUA y Reino Unido los cuales estarán listos para 2030. Lo que despertó la molestia de Francia, ya que eran ellos los que proporcionarían submarinos convencionales de diésel a Australia.
Ante esto se generó una tensión diplomática entre Francia y los miembros de AUKUS, en especial los EUA, ya que, para la percepción del gobierno francés, se buscó boicotear la compra de submarinos, así como desplazar a Francia como un actor en la región de Indochina. Los líderes de la Unión Europea respaldaron el reclamo de Francia y buscaron entablar un diálogo entre las diversas partes involucradas.
El nuevo pacto geopolítico, AUKUS, tiene como principales objetivos, el disminuir la actividad de China en Asia-Pacífico y contrarrestar la influencia de China en la región del Indo-Pacífico utilizando tecnología punta como es la inteligencia artificial y la computación cuántica. Así mismo se busca aunar los recursos, el conocimiento y las cadenas de suministro de sus aliados, esto para que EUA aumente sus capacidades de competir contra China. Con ello se pretende cercar y bloquear a China en su región estratégica. Con esta alianza EUA, quiere recobrar las viejas alianzas y priorizar la competición estratégica contra China, con el fin de inmutarlos y con ello lograr negociar.
Ante esto, China ha aumentado sus ejercicios militares en la región, por lo que se puede llegar a generar una carrera armamentística en la zona. Rusia, aliado estratégico de China, también ha levantado la voz, condenando la alianza AUKUS, preocupado por una escalada de tensiones que pudiera generar conflictos de desestabilización en la región y llevar al mundo a una nueva Guerra Fría.
China busca hacer frente a este nuevo intento de bloqueo, a través de su megaproyecto de la Nueva Ruta de la Seda, el cual tiene como objetivo el integrar diversas regiones y mercados, no solamente a través del mar, mediante puertos de alta tecnología, sino por medio de una serie de infraestructuras de carreteras y trenes de alta velocidad. Con ello puede romper el cerco marítimo de AUKUS y así seguir siendo el motor del comercio global con la gran cantidad de exportaciones que tiene.
AUKUS viene a ser una alianza geopolítica que intenta mantener el viejo dominio de EUA en la región de Asia-Pacífico, deja ver ya lo caduco de ciertas alianzas como lo es la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), así como el relegar a viejos aliados en la zona como lo era Francia y la misma Unión Europea. Mientras que, para China, AUKUS le ha permitido acrecentar a sus aliados en la región, quienes se han beneficiado de la inercia de su crecimiento económico.
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