Las redes sociales se han convertido en una potente herramienta de recolección de datos y sondeo electoral. Cambridge Analytica ha demostrado cómo explotar las RRSS para inclinar la balanza.
Las redes sociales se han convertido en una potente herramienta de recolección de datos y sondeo electoral. Cambridge Analytica ha demostrado cómo explotar las RRSS para inclinar la balanza.
El escándalo de la filtración de datos de Facebook que impulsó la comparecencia de Mark Zuckerberg ante una comisión del Senado de EE.UU. es sólo la punta del iceberg de un problema mayor: el tráfico de datos y la seguridad digital en el siglo XXI. El derecho a la privacidad o a la libertad de expresión se ven amenazados ante la falta de regulación digital y de visión política de los legisladores.
Facebook sufrió un tremendo varapalo en su salida a Bolsa en 2012, desde entonces trata de recuperarse. La red social mantiene un enorme conflicto sin resolver: cómo explotar su enorme potencia comercial sin extralimitar la privacidad de sus usuarios.
Mark Zuckerberg, el arquitecto de las redes sociales, un villano con las mujeres y traidor en los negocios, un triunfador y el multimillonario más joven del mundo.