Mariano Corbino
Desde el año 2012 el grupo islamista Harakat Al-Shabaab al-Mujahideen comúnmente conocido como Al-Shabaab –liderado por Ahmad Umar- prometió lealtad al grupo Al-Qaeda. En esta ocasión el grupo terrorista ha decidido atacar la ciudad de Garissa, la capital del condado de Garissa en la República de Kenia, una ciudad que pocos conocían hasta el lamentable hecho ocurrido en la Universidad el día jueves 2 de abril.
El 31 de octubre se festeja en muchos lugares del mundo Halloween donde la tradición marca que los más pequeños (y no tanto) se disfrazan y llaman a las puertas de las casas y, al abrir los propietarios, preguntan: “trick or treat” (truco o trato en español). Si la persona que abre la puerta contesta trato los niños reciben dulces, el truco se utiliza como una “amenaza” para el dueño de casa si este no le entrega los dulces y habilita a los niños a realizar travesuras contra los domicilios.
Seguramente a estas alturas se pregunte si el título y el encabezado son correctos, si la persona que se encarga de la edición es cómplice mío, si yo he tenido un lapsus y perdí noción de lo que estaba escribiendo, y al volver en mí creí que era un escritor de libros para niños, o sencillamente está esperando que le explique el porqué de esa frase. Sin lugar a dudas nada de lo anterior ha pasado, exceptuando que ha sido adrede debido a la inocencia de las palabras que los niños pronuncian al abrirse las puertas en contraste con la pregunta que, según la respuesta de quien abría la puerta en la universidad de Garissa, lo condenaba a la muerte.
La pregunta concisa y concreta que los terroristas de Al-Shabaab formularon el pasado jueves 2 de abril era “¿musulmán o cristiano?”. Quiénes contestaron cristianos encontraron, en su gran mayoría, la muerte. Ese día el grupo terrorista Al-Shabaab decidió acribillar a estudiantes y personal que se encontraban en la Universidad de Garissa en la República de Kenia, dejando un trágico saldo de más de 170 muertos -donde su gran mayoría eran jóvenes- y casi un centenar de heridos.
La palabra jóvenes ha sido resaltada debido a que Al-Shabaab, que se encuentra integrado no solo por nacionales de Somalia sino por numerosos extranjeros de Estados vecinos de Europa y Estados Unidos, significa “la juventud” y este es un dato que no debía dejarse pasar por alto.
La Universidad de Garissa se encuentra a 4,6 Km de la estación de policía más cercana y a 1,7 Km del hospital provincial. Estos datos son para que el lector pueda calcular mentalmente cuánto pudo demorar que las fuerzas policiales se hicieran presentes o el tiempo que demoraría trasladar a los heridos desde la universidad hasta el hospital.
Algo que hace más dramático todo el episodio es que, según afirman fuentes de inteligencia, Mohamed Kuno, un ex profesor de una madraza o escuela coránica en Garissa, podría ser el ideólogo de la matanza. Por ello, las autoridades de Kenia han decidido ofrecer una recompensa de 215.000 dólares. A raíz de este trágico acontecimiento, el Presidente keniata, Uhuru Kenyatta, no solo ha ofrecido sus condolencias a los familiares de las víctimas sino que ha exhortado a incorporar alrededor de 10.000 nuevos reclutas cuya inscripción está pendiente al cuerpo de policía, eso sí, durante tres días el Presidente de Kenia declaró luto nacional en conmemoración por las víctimas que sufrieron los ataques a “manos” del grupo terrorista.
A pesar del horror que el grupo terrorista causó en Garassi, ciudad que se encuentra a menos de 150 Km de Somalia, el 15 de abril cumplieron con las amenazas que habían realizado alrededor de diez días antes -un día antes del fin del toque de queda impuesto por el inspector general de la Policía, Joseph Boinnet, atacaron un complejo gubernamental en una concurrida zona de la capital de somalí, Mogadiscio.
Los ataques terroristas que se han suscitado en Garissa continúan alertando a la comunidad internacional y, en este caso específico, han extirpado de cuajo el futuro de los jóvenes acribillados en “manos de otros jóvenes” -recuerden el significado de Al-Shabaab- terroristas. Evidentemente la violencia está inclinando la balanza a su favor en detrimento de la educación y lo que esta conlleva, como por ejemplo la oportunidad de convertirse en un profesional para poder remediar los inconvenientes que existen en esas regiones cada uno desde el lugar que le corresponda.
Aristóteles dijo que “la única verdad es la realidad” y otros filósofos han dicho que existen tantas verdades como personas en el mundo y seguramente así sea. Lamentablemente, en este caso concreto los integrantes del grupo terrorista Al-Shabaab hicieron que la realidad ante los ojos del mundo sea la manera en que han acribillado el futuro de más de 170 personas.
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