28/03/2024 MÉXICO

Nuevo récord de emisiones de dióxido de carbono en 2011

2108978128_7e9f8cd859
El año 2011 se ha convertido en el peor en cuanto a emisiones de dióxido de carbono. Nunca antes se emitieron tantas toneladas a la atmósfera. ¿A qué se debe? Y, ¿qué es lo que provoca que unos países emitan más carbono que otros? En el siguiente artículo analizamos las principales claves.

El mundo está al rojo vivo


Cada año la Agencia Internacional de la Energía (AIE) ha publicado su estimación anual de emisiones de gases de efecto invernadero (GEH). Después de una caída de las emisiones en 2009 -causada por la crisis financiera global- y una subida récord de emisiones en 2010, el año pasado volvió a experimentar un aumento en emisiones de gases de efecto invernadero hasta las 31,6 gigatoneladas. Esto significa que se marca un nuevo récord de emisiones de GEH fueron las mayores de la historia, lo que reduce las esperanzas de controlar el calentamiento global, asegura la Agencia.  Esto representa un aumento de 1,0 Gt de GEH respecto a 2010, o el 3,2%.

El carbón representó el 45% del total de las emisiones relacionadas con el uso de la energía en 2011, seguido por el petróleo (35%) y gas natural (20%). En el 2011, las emisiones de GEH aumentaron un 6,1% en los países no pertenecientes a la OCDE, incremento que fue parcialmente compensado por una reducción del 0,6% de las emisiones dentro de los países de la OCDE.

Los principales países emisores

China: China hizo la mayor contribución al incremento global, con un aumento de sus emisiones de 720 millones de toneladas (Mt), o un 9,3%, debido principalmente al mayor consumo de carbón. La cantidad de CO2 emitido por unidad del PIB (valor conocido como intensidad de emisiones) se redujo en un 15% entre 2005 y 2011. Sin esta mejora las emisiones de CO2 de China en 2011 habrían sido superiores a las 1,5 Gt.

India: La India aumentó en 140 millones de toneladas sus emisiones, o un 8,7%, pasando por delante de Rusia para convertirse en el cuarto mayor emisor mundial por detrás de China, Estados Unidos y la Unión Europea. A pesar de este aumento, las emisiones per cápita de CO2 en China y la India siguen siendo sólo el 63% y el 15% de la media de la OCDE, respectivamente.

Estados Unidos: Estados Unidos redujo sus emisiones en 2011 en 92 Mt, o un 1,7%, debido principalmente al cambio en el uso del carbón por el gas natural en la generación de energía y a un invierno excepcionalmente benigno, lo que redujo la demanda de calefacción. Las emisiones han disminuido en 430 millones de toneladas (7,7%) desde 2006, la mayor reducción en ese período del mundo. Este desarrollo ha surgido por una disminución en el uso de gasolina en el sector del transporte (vinculado a la mejora de la eficiencia, precios más altos del petróleo y la crisis económica que ha reducido la distancia recorrida por vehículo) y un cambio sustancial del carbón por el gas en el sector eléctrico.

Unión Europea: Las emisiones de CO2 en la UE en 2011 fueron inferiores en un 69 Mt, o un 1,9%, debido a que el menor crecimiento económico supuso una reducción de la producción industrial, así como sumado a un invierno relativamente cálido que redujo la necesidad de uso de calefacción.

Japón: Las emisiones de Japón aumentaron en 28 Mt, o un 2,4%, como resultado de un aumento sustancial en el uso de combustibles fósiles en la generación de energía tras el trágico accidente de la central nuclear de Fukushima que provocó el cierre de todos reactores nucleares del país.


Las emisiones de carbono en el año 2020

La AIE ha realizado un ejercicio de estimación de cuáles serán las emisiones para el año 2020 en su publicación 450 Scenario of the IEA’s World Energy Outlook 2011, que establece un 50% de posibilidades de limitar el aumento de la temperatura media mundial a 2°C, lo que exige que las emisiones de CO2 alcancen un máximo de 32,6 Gt a más tardar el 2017, es decir, sólo 1,0 Gt por encima de los niveles de 2011. El Escenario 450 ve a un desacoplamiento de las emisiones de CO2 del PIB mundial, aunque aún queda mucho por hacer para alcanzar esa meta pues la tasa de crecimiento de las emisiones de CO2 en 2011 superó al del PIB mundial.

¿Por qué unos países emiten más que otros?

Existen varios factores por los cuales unos países emiten más emisiones de carbono que otros. A continuación desglosamos cuáles son algunos de estos factores.

Crecimiento demográfico: un mayor crecimiento demográfico de un país provoca el aumento del consumo, y por tanto la necesidad de incrementar la producción que satisfaga dicho consumo, y con ello, la necesidad de un mayor consumo energético y de recursos materiales. En resumen, el crecimiento demográfico implica un aumento de las emisiones de carbono, a menos que dicho crecimiento sea compensado por medio de una mejora de la eficiencia energética o de consumo de materiales.

Crecimiento económico: el aumento de la actividad económica de un país, atendiendo al grado de desarrollo del mismo, en función de su infraestructura tecnológica y mix energético (las diferentes fuentes energéticas –carbón, petróleo, gas, etc.- utilizadas en la producción de energía del país), provoca un comportamiento u otro en relación al nivel de aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero. Ello se halla asociado con el concepto de la curva de Kuznets ambiental, según el cual el crecimiento económico precede a la mejora ambiental. Así, una economía avanzada invierte más en mejora ambiental que una economía en desarrollo cuyos esfuerzos se destinan al crecimiento económico del país.

La composición económica sectorial: desacoplar el crecimiento de las emisiones de carbono y el crecimiento económico de un país suele ser algo posible en las economías avanzadas. Esto es así porque es resultado de los cambios estructurales hacia una economía de servicios, que implican cambios tecnológicos que a su vez reducen del uso de recursos materiales y permiten un menor uso de energía para obtener un determinado crecimiento económico. Además, como hemos comentado anteriormente, las economías avanzadas adoptan políticas para subsanar los impactos ambientales. En las economías en transición, en cambio, el desacoplamiento tiene lugar, en gran parte, como resultado de la reestructuración industrial y de las reformas del mercado para que los precios de la energía, materiales y otros recursos se aproximen más a sus costes económicos e internacionales.


La intensidad de las emisiones: la intensidad de emisiones de carbono es el resultado de dividir el conjunto de emisiones de un país y su PIB. Con ello, es posible conocer cuantas emisiones de carbono se generan por unidad de PIB producida. Aquellos países con una menor intensidad de emisiones son aquéllos con una mayor intensidad energética (cantidad de energía utilizada para producir una unidad de PIB) o bien con un mix energético más eficiente (con menor emisión de carbono por unidad de combustible consumido).

El nivel de competitividad: a medida que un país se hace más competitivo económicamente mejora su comportamiento ambiental. La innovación, la eficiencia y el uso de tecnología avanzada, son conceptos que suelen ir ligados a una mejor eficiencia ambiental, y con ello a una reducción de la contaminación. Aunque un exceso de regulación ambiental, con unos estándares sobreelevados pueden elevar de forma importante los costes y convertirse en un factor en contra de la competitividad de un país, obviar la realidad de la gravedad climática puede suponer aún más riesgos y un mayor coste económico en el futuro. Es por ello importante buscar un equilibrio adecuado entre unas mayores exigencias legislativas para la mejora ambiental y su coste, con el fin de garantizar que el crecimiento económico y las mejoras ambientales avancen simultáneamente.

Por qué China es el máximo emisor mundial de carbono

Tal y como acabamos de describir no existe una explicación aislada al factor del crecimiento de emisiones de carbono de un país. Buscando respuesta a un posible qué podríamos responder que es el crecimiento económico el factor principal que provoca el aumento de las emisiones de un país. Abordando el cómo podríamos indicar que dicho crecimiento no necesariamente siempre implica un aumento de emisiones (tal y como sucede en el caso de la Unión Europea que a pesar de crecer económicamente está reduciendo sus emisiones). Ello depende principalmente de la intensidad de emisiones, la cual al mismo tiempo viene caracterizada por la intensidad energética y el mix energético que utiliza el país.

Así, en la mayoría de países, el crecimiento económico (medido como el aumento del PIB por habitante) es el factor que tiene mayores niveles de influencia sobre el volumen de emisiones, por lo general poniendo presión al alza sobre las emisiones. Este es el caso en países tan diversos como los Estados Unidos, India, Indonesia, Australia, e Irán. En Rusia y Ucrania, la contracción económica de las últimas décadas ha contribuido a una disminución de sus emisiones.

Sorprendentemente, pero, el declive económico no es el mayor que más contribuye a la caída de las emisiones de Rusia sino, más bien, los cambios estructurales en su economía –evidenciado por la disminución de su intensidad energética. El descenso de la población y los cambios en el mix energético también han contribuido a esta evolución.


El caso de China

China ha experimentado en las últimas décadas una gran disminución de su intensidad energética (la cantidad de energía que utiliza para generar crecimiento económico), favoreciendo que sus emisiones “tuvieran que” disminuir. Sin embargo, esto se vio contrarrestado por el espectacular crecimiento de su economía, que ha provocado como resultado un aumento global de las emisiones durante los últimos años. En una analogía diríamos que China es un gran automóvil que ha conseguido reducir de forma importante la gasolina consumida por cada 100 km recorridos. Pero a su vez ha aumentado de forma espectacular la distancia total recorrida. ¿El resultado? Ha consumido mucha más gasolina.

En este sentido el mix energético también juega un papel relevante, considerando que en el caso de China su mix está compuesto principalmente por combustibles altamente contaminantes, pues se basa primordialmente en el uso del carbón y el petróleo (a pesar de un notable aumento de energías renovables en la última década), lo que acaba generando un valor de intensidad de emisiones (emisiones generadas como consecuencia del crecimiento económico).

Todo esto explica el porqué China ocupa actualmente el puesto número uno en el ranking de países más emisores de carbono en el mundo. Esperemos que no sea por mucho tiempo.

Ésta es una explicación sin ánimo de lucro

¿Quieres recibir más explicaciones como esta por email?

Suscríbete a nuestra Newsletter:


Lluis Torrent

Barcelona, España. Licenciado en Ciencias Ambientales, Máster en Intervención Ambiental, Máster en Relaciones Internacionales y Especialista en Ciencia Política. He trabajado como consultor ambiental para gobiernos locales y regionales y empresa privada. Socialmente comprometido, me apasiona explorar la fina línea que transcurre entre la política, la economía, la sociedad y el medio ambiente. Sígueme en Google+ Lluis Torrent


2 comments

    • Lluis Torrent Bescos

      25/01/2013 at

      Hola Miguel, gracias por tu comentario. Yo casi que anadiria que antes que la eficiencia energetica vendria el ahorro energetico, que no siempre viene de la mano tan solo de una mayor eficiencia a nivel tecnologico sino mas bien por un cambio de comportamiento de los ciudadanos. Las dos cosas son importantes, pero aparatos mas eficientes sin una mayor conciencia en su uso equivale a mas bien poco. Disculpa la falta de acentos, uso un teclado ingles!

      Reply

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

five + seventeen =

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.