28/03/2024 MÉXICO

¿Por qué, a pesar de los escándalos, Berlusconi sigue en el poder?

La situación que vive Berlusconi, para llevarse las manos a la cabeza. [Photo: segnaleorario Flickr account]
A pesar de los múltiples escándalos que han investido su personalidad, el Primer Ministro italiano, Silvio Berlusconi, sigue manteniendo el poder y puede contar con el apoyo de la mayoría relativa de los votos en Italia, una democracia “anómala” y criticada por amplios sectores de la comunidad internacional.

El líder más polémico de Europa


En los últimos meses el discutido Premier italiano, Silvio Berlusconi, ha estado en el centro de fuertes polémicas provocadas por numerosos escándalos, que han llevado a la oposición política a pedir su dimisión inmediata. Se le acusa de corrupción, de utilización ilegal de dinero público y de tener contactos con personajes supuestamente ligados a las mafias, movidas por los jueces de Milán. Pero, por si fuera poco, a todo esto se le han sumado escándalos relacionados con la prostitución – incluso de menores de edad – con las fiestas conocidas como Bunga Bunga en las residencias personales del Cavaliere en Arcore, cerca de Milán y en Villa Certosa, en Cerdeña.

Sea cual sea el grado de culpabilidad del hombre más criticado de Italia y de Europa – ésta es tarea para los jueces – hay que preguntarse cuáles son las causas que le permiten seguir en el poder y gozar de un elevado grado de apoyo político de los italianos.

¿Por qué Berlusconi recibe el apoyo de los italianos?

El poder mediático

La primera, y probablemente la más conocida, es el fuerte poder mediático del Cavaliere, dueño de tres canales detelevisión nacional pertenecientes al “Grupo Mediaset” y actualmente capaz de controlar también los altos vértices de las estructuras administrativas de los tres canales de la televisión pública, la RAI, en virtud del cargo de Primer Ministro que ocupa.

Bajo esfuerzo informativo del elector

La segunda razón, profundamente ligada con la primera, nos es ofrecida por la Ciencia política: el elector mediano – italiano, europeo y probablemente occidental – no tiene tiempo ni energías y, a veces, ni intención de dedicarse a la información política. Por esta razón utiliza algunos atajos que le permitan informarse sobre la actualidad política haciendo el mínimo esfuerzo: uno de los más importantes es la televisión, que ofrece información rápida y simplificada (“en píldoras”). El otro atajo más utilizado son las discusiones con amigos y familiares, quienes a menudo condicionan nuestra orientación política sin que podamos darnos cuenta, a la vez condicionados por los medios de comunicación.

Poco interés por la política

La tercera razón está ligada con lo anterior: los italianos se interesan poco por la política porque, en general, desconfían de los políticos. Especialmente después del escándalo de Tangentopoli en 1992 – que provocó la caída del gobierno socialista de Bettino Craxi, la reestructuración de algunos partidos, la desaparición de otros y el fin de la “Primera República” – la opinión generalizada entre la mayoría de la población es que la clase política italiana sufre de una corrupción endémica y sistémica, difícil de extirpar. La izquierda y la derecha representan dos caras de la misma moneda, siendo la institucionalización del poder de “la Casta” (nombre de un célebre libro de actualidad italiano, escrito por Rizzo y Stella, que vendió millones de copias), culpable de no actuar para el bien del país y preocupada exclusivamente en preservar sus privilegios.

Otro aspecto a tener en cuenta es la enorme máquina del partido de Berlusconi, “Il Popolo delle Libertá”, que le permite tener una importante ventaja relativa respecto a sus adversarios políticos. Gracias al imperio financiero de su fundador, el partido que actualmente detiene la mayoría relativa en el Parlamento italiano se distribuye capilarmente en todo el territorio peninsular y dispone, en general, de mayores fondos, si lo comparamos con los demás partidos, para sustentar su campaña electoral.


Una oposición fragmentada

La oposición de centro y de centro-izquierda en Italia no parece ser, hoy en día, una alternativa válida a la actualcoalición de gobierno, debido a las excesivas divisiones internas, a la falta de un programa político coherente y a su lejanía en relación a los problemas que más afligen a los electores. En los últimos diez años, el partido italiano que más ha aumentado su porcentaje de apoyo popular es la Lega Nord, partido de derecha, cuyos exponentes principales mantienen un actitud hostil hacia la inmigración – no sólo extranjera, sino también del Sur hacia el Norte de Italia – que a menudo desencadena en posturas abiertamente xenófobas.

El personaje Berlusconi: ícono para muchos

Otra razón, de carácter antropológico, fue dada hace algunos meses por un editorialista del New York Times, según el cual Berlusconi representa todo lo que el elector italiano medio desearía ser: un personaje público todopoderoso, riquísimo, de éxito, inteligente y buen orador, rodeado de chicas jóvenes y guapas, presidente de uno de los clubes de fútbol con más tradición (el F.C. Milán), que parece no padecer la vejez, un político, un empresario y el dueño de canales televisivos que fomentan el “culto de su personalidad” en el que es fácil caer.

Ésta es una explicación sin ánimo de lucro

¿Quieres recibir más explicaciones como esta por email?

Suscríbete a nuestra Newsletter:


Alessandro Demurtas

Licenciado en Culturas y derechos humanos y especializado en Cooperación internacional europea en la Universidad de Bolonia (Italia). Master en Relaciones Internacionales en IBEI- Barcelona, Master oficial en Relaciones Internacionales, Seguridad y Desarrollo en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB). Actualmente inscrito en el Doctorado de Relaciones Internacionales e Integración Europea de la UAB, con tesis sobre las amenazas del terrorismo y de las armas de destrucción masiva para la Unión Europea. Analista en Geopolítica y Relaciones Internacionales para la revista especializada "Equilibri.net" en las áreas de Europa y América del Norte.


Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

sixteen − eight =

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.